Por primera vez en Israel, parejas que portan el virus del SIDA estarán en posibilidad de intentar un embarazo sin que la madre sea infectada por el esperma o que el bebé contraiga el VIH durante el parto. Tales servicios especializados, buscados por docenas de parejas alrededor del país, quedaron disponibles el martes en la unidad de Fertilización In Vitro (IVF) del Centro Médico Rambam. Ahora el VIH y SIDA son considerados más como una enfermedad crónica, posible de sobrellevar con un “cóctel” de medicamentos inhibidores de la proteasa que, como [enfermedad] que significa la muerte, los portadores pueden pensar en el futuro.Hasta ahora, las casi dos docenas de unidades de IVF (Fertilización In Vitro) del país rechazaban esas parejas, algunas de las cuales viajaron al exterior para la Fertilización in Vitro usando esperma, “lavado” con químicos para remover el virus. El virus puede ser transmitido por el esperma de un hombre infectado a la madre o al bebé o transferido al feto durante el embarazo, el parto o el amamantamiento. Hasta ahora, si el hombre era portador, era imposible que la Fertilización In Vitro fuera realizada, porque el esperma infectaría a la mujer si tenían sexo sin protección, mientras que cualquier feto podía infectar a la madre durante el embarazo.
Una pareja en la cual uno está infectado y el otro no se la llama [pareja] “discordante”. Si ambos miembros son portadores, no hay problema en tener una concepción normal, o inseminación artificial, pero la madre tendría que ser tratada con el “cóctel” de medicamentos inhibidores de la proteasa durante el embarazo y el bebé después del parto.
Como resultado de una apelación a la Alta Corte de Justicia por la Fuerza de Trabajo del Sida de Israel, el Ministerio de Salud se vio forzado encontrar una alternativa. El Centro Médico de la Universidad de Hadassah en Ein Kerem de Jerusalén fue designado por el ministerio para lavar el esperma infectado. El servicio se abrió en enero. Ahora Rambam inauguró su unidad de IVF (Fertilización In Vitro) para portadores de VIH para completar el proceso.
Cada huevo saludable es inyectado bajo un microscopio con un espermatozoide saludable en un proceso llamado inyección de esperma intra-citoplásmico.
El Ministerio consintió abrir el servicio cuatro meses atrás. La implementación requirió el establecimiento de un laboratorio especial y subclínicas que lo sirven. El instituto de inmunología de Rambam recibe a las parejas, mientras que el instituto de enfermedades del hígado, el laboratorio virológico y la unidad de IVF (Fertilización In Vitro) cooperan. Esta unidad fue construida por la rama de arquitectura del Rambam en un muy alto estándar. El Prof. Shimon Reisner, director del hospital, agregó que Rambam era uno de los pioneros en la Fertilización In Vitro y tiene experiencia en el sistema inmunológico y enfermedades del hígado.
El Dr. Chezy Levy, jefe de la administración médica del Ministerio, estuvo presente en la ceremonia, junto con el Prof. Joseph Itskovitz, quien dirige el Departamento de Ginecología y es líder mundial en Fertilización In Vitro. También estuvo presente el Prof. Shimon Pollack, director del Instituto de Inmunología, y Yonatan Karni, director de la Fuerza de Trabajo del Sida de Israel.
Karni dijo que su organización libró una “batalla legal que hoy está expresada en la medicina. El establecimiento de este servicio es un punto de luz”.
Pollack afirmó que, en el futuro, producir embarazos para portadores del VIH se convertirá en rutina. El proceso de lavado del esperma fue desarrollado hace un par de décadas, en Estados Unidos. El personal del Hadassah fue enviado al exterior para estudiarlo. Nada nuevo tenía que ser aprendido por Rambam para realizar la Fertilización In Vitro o tratar a la madre y al bebé para prevenir que fueran infectados con el VIH, pero las nuevas instalaciones tenían que ser construidas y los procedimientos establecidos.
La transmisión del virus por un esperma infectado no lavado puede suceder después de la concepción y de una madre infectada al feto durante el embarazo, pero el momento más probable es durante el parto. A las mujeres con VIH se les advierte que no amamanten a sus bebés. Si hay un peligro de que el feto sea infectado, es en la segunda mitad de la gestación. Un bebé nacido a partir de un esperma no lavado o de una madre portadora es tratado dándole por cuatro semanas el cóctel de drogas después del nacimiento para prevenir que la infección se desarrolle en su cuerpo.
El servicio del Rambam fue establecido en un edificio construido por el personal técnico del hospital y localizado en una ubicación discreta en el hospital para asegurar la privacidad de sus usuarios. Unos 2 millones de shekels fueron invertidos en él y un alto nivel de control de calidad fue establecido para asegurar la seguridad de los pacientes y del personal.
Debido a la fila de parejas esperando este servicio, dijo Pollack, podría haber docenas que se registrarán pronto para el tratamiento. Cuando sean atendidas, se espera que haya unas 15 parejas israelíes por año y posiblemente más del exterior.
Mientras que la Fertilización In Vitro con esperma lavado está permitida en algunos países europeos, está prohibida por la Administración de Comida y Drogas de los Estados Unidos, debido a que hubo un caso en el cual una mujer resultó infectada ya que el hombre no recibió la terapia anti-retroviral para reducir su “carga viral”. Como resultado de este trágico caso, los Centro para el Control de la Enfermedad de Estados Unidos no aprobaron su práctica. Pollack dijo que consideraba que el procedimiento era muy seguro, debido a que hubo 5,000 o 6,000 casos en Europa en los cuales nada adverso ocurrió.
El lavado del esperma en Hadassah será provisto como parte del paquete de servicios médicos, tal como la Fertilización In Vitro para producir dos bebés saludables por mujer (hasta una edad máxima) es gratis. La Fertilización In Vitro está incluida en el paquete pagado por el fondo de salud de la pareja. La tecnología está disponible en unas pocas docenas de centros en el exterior, pero en ninguno de esta región. Así lo afirmó el Prof. Shlomo Ma´ayan director del Centro de SIDA de Hadassah, que espera turistas médicos de Turquía, Grecia, Chipre y otros países.
El lavado químico usado hoy en día fue puesto en práctica para otros tipos de procedimientos y se descubrió que impedía que el virus del VIH se multiplicara. Sin embargo, ese procedimiento hace que sea ligeramente más difícil producir un embarazo. El índice de éxito para el primer intento es de alrededor del 30%, de acuerdo a Ma´ayan. El semen lavado es examinado para detectar VIH sólo para estar seguros y después es congelado a -180 grados Celsius antes de ser usado. La inseminación es realizada en el Hadassah, mientas que la Fertilización In Vitro es hecha en Haifa.