viernes, 19 de marzo de 2010

La anticoncepción de emergencia no frena el número de embarazos no deseados

  • Disponer de la píldora no aumenta el número de relaciones sexuales sin protección
Una joven embarazada en una clínica. (Foto: Afp)

MADRID.- Ni para lo bueno ni para lo malo. Ni para sus defensores ni para sus detractores. La anticoncepción de emergencia, la famosa píldora del día después que tanto ha dado que hablar, parece que pasa sin pena ni gloria por las mujeres. Tener fácil acceso a esta pastilla o, incluso, disponer de ella antes de que se produzca una situación de riesgo no ha disminuido los índices de embarazo, según muestra un estudio de 11 trabajos que han analizado la cuestión.

Pero, por otro lado, el saber que se cuenta con esa opción tampoco aumentó el número de relaciones sexuales sin protección ni de enfermedades de transmisión sexual.

El análisis que aparece en 'The Cochrane Library', la publicación que se encarga de revisar las evidencias científicas sobre los tratamientos médicos, ha profundizado en los estudios realizados en China, EEUU, India y Suecia con la participación de 7.695 mujeres. Los datos muestran que la eficacia de estos regímenes anticonceptivos a la hora de evitar embarazos no deseados es de entre un 47% y un 53% si se toma correctamente dentro de las 72 horas después de la relación sexual. ¿Por qué, entonces, no ha influido en la tasa de embarazos?

Según Chelsea Polis, de la Escuela de Salud Pública de la Universidad Johns Hopkins (EEUU) y principal firmante de la revisión, "la realidad es que esta píldora no se está tomando. Algunas mujeres tienen muchos problemas para conseguirla, bien porque les da vergüenza ir a la farmacia donde las venden sin receta [es el caso de España] o porque necesitan una prescripción médica en algunos países. Y quienes la tienen a mano no la toman porque piensan que no van a quedarse embarazada a pesar del sexo desprotegido".

Los estudios, que compararon a un grupo de mujeres que contaban con provisiones de la píldora de emergencia antes de sus relaciones con otro grupo en el que las mujeres tenían que ir a por ella después del sexo de riesgo, mostraron que no había diferencias significativas en los embarazos no deseados que se produjeron en ambos grupos. Una conclusión que contradice las optimistas proyecciones que se hicieron en un principio sobre este método anticonceptivo. Su impacto sobre la salud pública está siendo mucho menor de lo esperado.

Las preocupaciones sobre los posibles efectos secundarios es otro de los motivos que argumentan las féminas para no tomar la 'píldora del día después'. Ante esta realidad, Polis afirma que "las mujeres deberían recibir más información sobre este medicamento porque es un método útil, seguro y eficaz para prevenir embarazos no deseados".

Los mosquitos vacunadores

  • La modificación genética de estos insectos los hace capaces de inocular vacunas
  • La herramienta, no obstante, tiene una dudosa aplicación en salud pública
El mosquito 'Anopheles stephensi'. (Foto: Jim Gathany)

MADRID.- ¿Y si, en lugar de transmitir la malaria, las hembras del 'Anopheles' inoculasen la vacuna frente a esta enfermedad? ¿Ciencia ficción? No tanto. Un equipo de investigadores japoneses acaba de presentar unos mosquitos modificados genéticamente para vacunar contra la Leishmaniasis a sus 'víctimas'.

El concepto de 'vacunadores voladores' se propuso como una forma de emplear la ingeniería genética para controlar las enfermedades infecciosas transmitidas por insectos hematófagos. La idea consiste en modificarlos para que al succionar la sangre transmitan una vacuna, pasando así de ser una plaga a ser beneficiosos. Hasta ahora, esta hipótesis no se había materializado.

La revista 'Insect Molecular Biology' recoge la primera prueba de concepto de que los 'vacunadores voladores' son factibles. El trabajo, firmado por científicos de Universidad Medica Jichi (Japón), describe la manipulación genética de varios mosquitos 'Anopheles stephensi', el principal vector de transmisión de la malaria en el sudeste asiático.

El primer paso fue estudiar detenidamente las glándulas salivares de estos artrópodos, incluida su genética. Este paso es crucial ya que tanto la vacuna que se desee inocular como los parásitos que normalmente transmiten los mosquitos deben estar en su saliva.

La confirmación

Una vez detallado este sistema, los autores introdujeron en el ADN de varios embriones de 'A. stephensi' un gen que codifica para el antígeno SP15, molécula que actúa como vacuna frente a la Leishmaniasis. Los ejemplares adultos de mosquito se utilizaron después para que picaran a varios ratones. Éstos mostraban niveles elevados de anticuerpos anti-SP15, aunque no se comprobó si eran útiles frente al parásito de la Leishmaniasis.

"Tras las picaduras, se indujeron respuestas inmunes protectoras, como en la vacunación convencional pero sin dolor y sin costes", explica Shigeto Yoshida, líder del estudio. "Más aún, la exposición continua a las picaduras mantendrá niveles elevados de inmunidad, mediante un estímulo natural, durante toda la vida", añade.

Sin embargo, es "improbable" que estos mosquitos vacunadores "sean una método viable para el control de enfermedades porque es una forma inaceptable de administrar vacunas", señalan los propios autores. La falta de control sobre los insectos y la dosis de vacuna recibida, así como la aceptación pública de la liberación de estos mosquitos transgénicos dificultan su uso.

Pero el análisis de las glándulas salivares sí "podría ser una herramienta muy poderosa para dilucidar las interacciones entre el parásito de la malaria y la saliva del díptero", aclaran.

"Hemos demostrado que los mosquitos transgénicos que segregan una proteína ajena como componente de su saliva pueden desencadenar respuestas inmunes", escriben los investigadores. "Hemos alcanzado, por primera vez, el concepto original de 'vacunador volador'", concluye Yoshida.

La 'obesidad extrema' amenaza a los niños

  • El exceso de kilos de los menores estadounidenses es peor de lo esperado
  • Los chicos obesos extremos pueden perder entre 10 y 20 años de vida
La comida rápida, una de las causas de la obesidad infantil.  (Foto: El Mundo)

La comida rápida, una de las causas de la


WASHINGTON | MADRID.- Pese a los constantes esfuerzos por prevenirla, lo cierto es que la obesidad extrema entre los niños estadounidenses es mucho peor de lo que se creía. Su exceso de kilos les pone en una situación en la que tienen riesgo de sufrir problemas de salud a medida que crecen, según un nuevo estudio.

El trabajo, publicado en la revista 'Journal of Pediatrics', se llevó a cabo con más de 700.000 niños y adolescentes en el sur de California, una muestra suficiente para encontrar que más del 6% o 45.000 menores eran extremadamente obesos y más niños que niñas tenían problemas de sobrepeso.

"Este estudio es único porque es la primera vez que tenemos un gran panorama de lo que está ocurriendo con la obesidad en nuestros niños", indica la coautora del estudio, la doctora Amy Porter, del sistema de salud del Kaiser Permanente. "La prevalencia de la obesidad en los niños es mucho mayor de lo que creíamos", señala Porter.

La investigación también revela otro dato preocupante. La 'obesidad extrema' está en aumento en casi todos los grupos y ya afecta al 7% de los niños y al 5% de las niñas, al igual que a poco más del 2% de todos los chicos menores de cinco años.

Para Corinna Koebnick, investigadora de Kaiser Permanente, los resultados de este amplio estudio multiétnico, con estimaciones para los subgrupos étnicos por edad y sexo, se pueden aplicar a todo el país.

"Los niños que son extremadamente obesos podrían seguir siendo extremadamente obesos de adultos y todos los problemas de la salud asociados con la obesidad estarán en su futuro", dijo Koebnick. "Sin grandes cambios en su estilo de vida, estos niños podrían tener una vida entre 10 y 20 años más corta y desarrollarán problemas propios de los 60 años entre los 20 y los 30", agregó.

Nueva categoría

Desde que llegó a la Casa Blanca, la primera dama de EEUU, Michelle Obama, está liderando una campaña gubernamental para combatir la obesidad infantil, que está centrada en la mejora de la nutrición en los hogares y las escuelas.

Dos tercios de los adultos estadounidenses sufren sobrepeso u obesidad y un tercio de los niños son obesos, lo que aumenta el riesgo de contraer enfermedad cardíaca, diabetes y otras enfermedades crónicas. Además, este problema cuesta 150.000 millones de dólares al año al sistema de salud.

Los investigadores intentaron determinar cuántos niños en una zona del sur de California eran extremadamente obesos en base a una nueva definición de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por su sigla en inglés).

Los médicos no definen a la obesidad infantil de la misma manera que para los adultos. Los niños obesos son aquellos cuyo peso supera el percentil 95 para su edad y altura y los extremadamente obesos son los que pesan 1,2 veces más que esa medida.

En el estudio, los investigadores analizaron los registros de salud de 710.949 niños y adolescentes de entre dos y 19 años inscritos en un plan de salud en 2007 y 2008. El grupo estaba casi igualmente dividido por sexo y alrededor de la mitad eran hispanos.

El equipo halló que los niños con mayor peso eran adolescentes afroamericanas y adolescentes hispanos varones. Los niños provenientes de las islas de Asia-Pacífico y los blancos tenían el menor porcentaje de obesidad extrema.

sábado, 13 de marzo de 2010

ABUSOS A MENORES

Los pediatras denuncian que ocho de cada 10 casos de maltrato infantil no se detectan

  • Los pediatras insisten en la dificultad de conseguir datos que reflejen la realidad
  • El 60% de los que acosan en el colegio comete algún delito antes de los 24 años

MADRID.- Ocho de cada diez casos de maltrato infantil no se detectan en España, según estimaciones realizadas por la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP) y la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap).

Ambas entidades señalan que, según sus estimaciones, basadas en diferentes estudios, en España "sólo" se detectan del 10% al 20% de los casos de maltrato infantil, algo que, según Carmen Martínez González, la pediatra de AEPap, explica "las dificultades para conseguir datos que reflejen la realidad".

Según esta especialista, el 60% de los menores que acosan en el colegio comete algún delito antes de los 24 años. "Perpetúan la violencia y la trasladan al ámbito laboral, familiar o vecinal". Además, en España, la prevalencia estimada de maltrato infantil en las distintas comunidades autónomas oscila entre cinco, 15 y 19 casos por cada 10.000 menores. En el caso del 'bullying' o acoso escolar, la cifra, según sus cálculos, asciende al 17%.

En cuanto a las causas que subyacen en la violencia dentro de las aulas, los expertos detectaron por parte de los padres, familiares y amigos desatención física o emocional severa [hacia el niño violento], desestructuración familiar, carencia de experiencia en el cuidado del niño, de sus características evolutivas; deficiencia mental, inestabilidad emocional, depresión, inmadurez, pobre autoestima y problemas psicológicos o aislamiento social.

También situaron como motivo "desencadenante" de una actitud de maltrato entre los compañeros el que familiares y amigos estén afectados por el alcoholismo y otras drogodependencias, la prostitución, la delincuencia, que se trate de hijos no deseados o de padres adolescentes, así como los modelos "inadecuados" de disciplina.

En cuanto a los factores de riesgo de los niños acosados, destacan tener discapacidades, minusvalías psíquicas, padecer defectos congénitos o problemas de salud crónicos, además de la hiperactividad.

Otros aspectos que influyen en el acoso escolar son el nivel socioeconómico y cultural, el desempleo, la inestabilidad laboral, la pobreza, el hacinamiento, la aprobación cultural de la violencia y el castigo físico, los frecuentes cambios de domicilio frecuente o el exceso de vida social, de trabajo o competitividad.

En este sentido, el pediatra de la SEPEAP, Patricio José Ruiz Lázaro, valoró que la violencia entre menores debe ser tomada como una "cuestión de salud pública, que se puede prevenir". Además, aseguró que detrás de estos comportamientos hay "creencias y actitudes erróneas que favorecen la violencia" y que, a su entender, deben desterrarse.

Medidas

Ante esta situación, los pediatras recomiendan, por ejemplo, "la ampliación generalizada del horario de la utilización de infraestructuras sociales, educativas, culturales y deportivas para la realización de actividades que favorezcan la creación de vínculos saludables". También llaman a "ofertar alternativas saludables de ocio y tiempo libre a los adolescentes".

Además, solicitan que se inicie "un proceso de elaboración de estrategias que eviten el aislamiento y favorezcan la integración y cohesión social". Invitan también a crear "espacios de reflexión e intercambio entre los distintos agentes sociales" o que las actividades de prevención de la violencia se realicen "necesariamente" con participación de jóvenes.

Otras propuestas pasan por "fomentar una educación que desapruebe clara y explícitamente la violencia de cualquier tipo y promueva la igualdad de género desde que los niños son pequeños, tanto en el ámbito familiar como escolar" o animar a los padres a participar en actividades de educación para la salud que "incrementen sus habilidades educativas y afectivas". También solicitan la mejora de la formación del personal sanitario y de los profesores para "detectar situaciones de riesgo importante, susceptibles de apoyo y seguimiento desde servicios sociales
PROBLEMAS DE CONDUCTA Y GASTROINTESTINALES

'Rebeldes' por culpa del estreñimiento

  • Un 36% de los menores estreñidos sufre trastornos emocionales y de conducta
  • Se debería indagar la existencia de estas patologías en los niños con el problema
Un niño es oscultado por un médico. (Foto: El Mundo)

MADRID.- Seguramente usted nunca se lo haya planteado. Pero deténgase un par de minutos a reflexionar si su hijo tiene problemas de conducta y, además, es estreñido. Pues, aunque aparentemente nada tenga que ver una cosa con la otra, lo cierto es que ambos factores están relacionados.

Los comportamientos problemáticos son más frecuentes en los niños y en los adolescentes con estreñimiento funcional que entre los que acuden con 'normalidad' al aseo.

"El estreñimiento funcional en menores es un motivo frecuente de consulta (3% de las visitas al pediatra) y consiste en una alteración en la frecuencia, volumen, consistencia o facilidad de expulsión de heces. Su asociación con problemas de conducta está "descrita en estudios previos en los que se ha indicado que en niños con estreñimiento funcional se observa la existencia de alteraciones del comportamiento. Sin embargo, se desconoce si éstas son consecuencia del problema del estreñimiento o viceversa", comenta Juan José Carballo, psiquiatría infantil de la Fundación Jiménez Díaz de Madrid.

Ahora nuevos datos se suman a esta evidencia científica. Son los procedentes de una investigación dirigida por Marieke van Dijk, de la Universidad de Amsterdam (Holanda), en la que se constata la elevada prevalencia de problemas emocionales y de comportamiento en los menores que no pueden o no quieren (en algunos casos es el propio niño el que retiene las heces) ir al 'retrete'.

La investigación, publicada en la revista 'Pediatrics', ha contado con la participación de 133 niños y adolescentes holandeses de cuatro a 18 años con estreñimiento funcional del Hospital Infantil Emman. Ninguno de los pacientes había recibido tratamiento psiquiátrico ni psicológico en el año anterior al trabajo.

Tipos de problemas

Los científicos recogieron información sobre los problemas de conducta internalizantes (síntomas de ansiedad y depresión) y los externalizantes (conductas oposicionistas, desafiantes, de hiperactividad y conducta antisocial) a través de un cuestionario que hicieron llegar a los padres.

Los datos revelan que hasta un 36,8% de chicos y chicas estreñidos presentaba problemas de conducta. La duración de su estreñimiento se relacionaba también con un aumento del riesgo de padecer estas alteraciones.

"La presencia de incontinencia fecal y una extensa producción de defecaciones (dos características del estreñimiento) se asoció asimismo con estos problemas, pero sólo con trastornos externalizantes y no con los internalizantes. Los menores con estreñimiento funcional que también presentaban incontinencia urinaria nocturna son los que mayores puntuaciones obtuvieron en comportamiento problemático", aclaran los autores en su investigación.

Para ellos, "la elevada prevalencia de estos trastornos en menores con estreñimiento justifican que el equipo médico que los atiende incorpore al diagnóstico el chequeo de estos trastornos.... Porque aquéllos con problemas de conducta y sus padres podrían beneficiarse de tratamientos como la psicoterapia de comportamiento", defienden los investigadores.

El doctor Carballo cree que pese a los datos hay que destacar algunas limitaciones del estudio. "Debido a su diseño no pueden establecerse relaciones de causalidad. La selección de los pacientes en un hospital hace que los resultados no puedan generalizarse a todos los pacientes con estreñimiento funcional. Por otro lado, la valoración de los trastornos de conducta únicamente a través de un cuestionario y no mediante una entrevista clínica con los propios pacientes es una importante limitación. La obtención de más información, como del funcionamiento escolar, favorecería la obtención de una valoración de la situación socioemocional del menor más completa".

domingo, 7 de marzo de 2010

IDENTIDAD DE GÉNERO

Mi hijo dice que es una niña


PREGUNTA.- Tengo un niño de tres años, al que le gusta los vestidos de niña, y a veces dice que es una niña, incluso en carnaval se quiere disfrazar de cenicienta. Le gustan Daisy y Minnie en vez de Donald y Mickey, y Blancanieves más que lo siete enanitos, (a su hermano mayor era todo lo contrario). ¿Quiere significar algo todo esto?. Gracias

RESPUESTA.- Los niños por debajo de la edad de 3 años suelen jugar generalmente solos. Cuando están con otros niños presentan el «juego paralelo», en el que, aunque físicamente juntos no juegan los unos con los otros. Entre los 3 y 4 años los niños ya comienzan a jugar compartiendo los juguetes e interaccionan entre sí en el juego.

Por otro lado, muchos niños, especialmente aquellos menores de 5 años, tienen amigos imaginarios. Durante ese juego, en muchas ocasiones les es difícil separar lo real de lo imaginario, sin que esto suponga un problema psicológico en estas edades.

La identidad de género, esto es, el reconocimiento de ser un niño o una niña, ocurre entre los 18 meses y los 36 meses aproximadamente, aunque algunos autores estiman que se inicia incluso antes de esta fecha. Para poder determinar una alteración en este aspecto, los niños tendrían que presentar una identificación fuerte con el otro sexo de forma permanente (no solo en el juego), así como indicar de forma persistente que se sienten a disgusto con su propio sexo o realizar verbalizaciones de que su sexo es inapropiado (por ejemplo, niños con trastornos de identidad de genero pueden indicar que su pene o testículos desaparecerán, o desear no tener pene, o rechazar actividades, juegos o juguetes estereotipados como masculinos). Además esos problemas no estarían originados por ninguna condición física subyacente y han de condicionar un deterioro importante en el funcionamiento de los niños.

SÍNDROME DE TOURETTE

A qué experto acudir


PREGUNTA.- Tengo un hijo con Síndrome de Tourette. Con tics temporales y fluctuantes desde los cinco años, fue diagnosticado a los nueve años. Ahora tiene 11. Estuvo a tratamiento con risperidona (Risperdal ) y ahora con aripiprazole (Abilify, 5 mg.) Aunque atenuados, los tics continúan. No tiene TOC, ni tampoco hiperactividad; su rendimiento escolar es alto y mantiene las amistades. Su labilidad emocional es muy alta. El caso lo lleva un neuropediatra, pero me da la impresión de que un síndrome tan complejo (ansiedad, labilidad, tics,...) que encaja mejor en un enfoque psiquiátrico. Está en puertas de la pubertad, y supongo que los cambios hormonales podrán exacerbar sus síntomas. Preguntas: ¿es previsible el empeoramiento? ¿El cuadro se agrava en la adolescencia, o cuando sea adulto? ¿No tendría que ser derivado a un psiquiatra? Gracias.

RESPUESTA.- El Síndrome de Tourette fue descrito por primera vez en 1885 por George Gilles de la Tourette. Es un trastorno neurobiológico con de herencia compleja y causa desconocida. Se caracteriza por la presencia de tics motores y vocales, que suelen comenzar en la infancia.

Se estima que un 60-80% de los casos suelen verse acompañados de otros trastornos psiquiátricos como el trastorno obsesivo compulsivo, el trastorno por déficit de atención e hiperactividad o trastornos del control de los impulsos. También se ha descrito la presencia concomitante de trastornos de ansiedad y depresión.

Estos trastornos comórbidos interfieren en la vida académica y relacional de los pacientes y pueden ser incluso más limitantes que los tics si no son adecuadamente diagnosticados y tratados y por tanto suele ser aconsejable un seguimiento psiquiátrico desde su inicio.

En cuanto a datos de evolución del trastorno se ha indicado que los tics suelen ser más severos sobre los 10 años y disminuyen posteriormente. A los 18 años se estima que un 50% de los pacientes refieren no presentar ya tics, aunque algunas investigaciones señalan que un 50% de estos los tendrá pero de una forma más leve. Aunque los varones presentan una mayor variabilidad en la mejora a lo largo del tiempo, tienden a mejorar más que las mujeres. En las mujeres no se ha visto relación entre los niveles hormonales y las fluctuaciones en los tics
NUEVAS EVIDENCIAS CIENTÍFICAS

El lenguaje de menores de dos años no se desarrolla con los DVD educativos

  • Un estudio con 88 menores de dos años echa de nuevo por tierra esta herrramienta
  • Los autores defienden la interacción padres e hijos para mejorar sus habilidades
Uno de los volúmenes de la serie. (Foto: EL MUNDO)
REUTERS

NUEVA YORK.- Entretener a los niños con DVD educativos no ayuda a reforzar sus habilidades del lenguaje, según un estudio estadounidense que se centró únicamente en un producto de la serie 'Baby Einstein' de la compañía Walt Disney.

El trabajo de los investigadores de la Universidad de California (Estados Unidos), publicado en 'Archives of Pediatrics and Adolescent Medicine', exhibió el DVD a niños de uno a dos años.

Durante seis semanas, el equipo dividió a 88 niños al azar en dos grupos: uno vio el DVD varias veces por semana y el otro no lo miró. Los investigadores evaluaron luego sus capacidades lingüísticas, basándose en cuántas palabras conocían los niños según sus padres y en cómo respondieron a las pruebas.

Al final del periodo de estudio, los bebés que habían visto el DVD no mostraron un mayor conocimiento que los que no lo habían mirado.

Los investigadores también consultaron a los padres sobre los hábitos televisivos de sus hijos antes de iniciar el ensayo. Sus datos mostraron que el vocabulario era más escaso en aquellos bebés que habían empezado muy pronto a visualizar los DVD.

La compañía ha recalcado en un correo electrónico enviado a 'Reuters Health' que sus DVD "no afirman tener resultados educativos".

En su página de Internet, la empresa apunta que sus productos "no están diseñados para que los bebés sean más inteligentes", sino para "involucrar a los bebés y proporcionar a los padres herramientas que ayuden a sus hijos a enfrentarse con el mundo que los rodea".

Consecuencias de la pantalla

"El resultado del estudio está en línea con investigaciones anteriores", ha declarado Rebekah Richert, autora principal de la investigación. "Los padres que colocan a sus hijos frente a las pantallas pueden estar intentando remediar el lento desarrollo del lenguaje o pueden estar usando los DVD como "niñeras", recortando el estímulo social", defiende.

"Muchos niños, particularmente cuando son pequeños, parecen tener este tipo de vídeos", afirma la doctora Richert. "Mi mensaje sería promover la interacción directa entre padres e hijos", añade.

Aunque no se sabe bien cómo afecta la televisión al lenguaje, esta investigadora y su equipo han escrito en su informe que la Academia Estadounidense de Pediatría recomienda que los niños menores de dos años se mantengan alejados de la pantalla.

Algunos expertos incluso sugirieron que los vídeos para bebés pueden ser perjudiciales porque impiden el aprendizaje social y cognitivo.